lunes, 30 de enero de 2017

En bici por la ciudad. Circulación cívica y segura.

La bicicleta es un vehículo más, por tanto estamos sujetos a unos normas de circulación y por supuesto a un respeto por parte de los otros vechículos. Montar en bici para desplazarnos por la ciudad no solo es saludable, sino ecológico y divertido. Solo hay que tener algunas normas de seguridad en cuenta para evitar percances.
La primera medida para montar en bici por la ciudad de manera segura es hacer un buen mantenimiento de la bicicleta : frenos, cadena, cubiertas, tornillos… si la máquina está perfecta, solo tendremos que preocuparnos de nuestras habilidades como conductores.

 La elección del trayecto más seguro para circular con la bici

No siempre el camino más corto es el mejor. Cuando circulamos en bicicleta lo primero que tenemos que pensar para ver por dónde vamos es qué camino es el más seguro y en el que nos encontraremos menos coches y obstáculos. Desde luego los afortunados que viven en una ciudad con un buen carril bici ya tienen este problema solucionado.


En muchos casos vale la pena hacer algún kilómetro de más si el trayecto tiene poca circulación de coches y semáforos. En estas condiciones iremos mucho más tranquilos sin el estrés y la atención que requiere estar rodeado de coches. Los stop y semáforos son puntos de frenado y arrancada, cuantos menos haya en nuestro camino mejor, además de por seguridad, por economía en el pedaleo.

viernes, 13 de enero de 2017

NO al aceite de palma.

No basta con decir "no compro aceite de palma" para evitar que este producto esté presente en nuestro consumo. La OCDE calcula que cada ciudadano europeo consume al año 59,3 kilogramos de aceite de palma, aun cuando el consumo directo de esta grasa no es propio del continente, como si ocurre en cambio en lugares de África y Asia.
El aceite de palma se esconde bajo múltiples formas y denominaciones en numerosos productos no solo de la industria alimentaria sino también de la química, hasta el punto de que uno de cada dos productos del lineal del supermercado lo contiene de una u otra forma. Sin embargo, su consumo no es en absoluto recomendable por diversas razones, tanto de salud como de sostenibilidad medioambiental.
 Con este post os intentare explicar qué es el aceite de palma, por qué es tan importante para la industria del consumo doméstico en general y por qué es recomendable rechazar su consumo. También os expongo la forma de localizarlo en los distintos productos de supermercado y cómo presionar para que las grandes multinacionales limiten o directamente eliminen su inclusión.

 1. ¿Qué es el aceite de palma? 

El aceite de palma es la grasa que se obtiene del prensado de la pulpa del fruto de una palmera africana llamada Elaeis guineensis o palma de Guinea. Esta palmera se caracteriza por su rápido crecimiento y el alto rendimiento de su fruto, así como por la agresividad respecto al entorno para captar los recursos . Para entendernos, a nivel mediterráneo se pude equiparar con los pinos, que hacen bosques densos pero pobres en variedad en su interior y en los que el suelo se va degradando.
El aceite de palma se caracteriza por tener un punto de fusión muy alto , siendo un híbrido de grasa y aceite vegetal que a 30 grados centígrados ya es sólido. Se compone de un 50% de ácidos grasos saturados, sobre todo ácido palmítico y ácido esteárico ; un 35-40% de ácido oleíco y un 10-15% restante de ácidos graso monoinsaturados.